Anoche terminé de leer el libro que da título a este post. Se trata de un libro escrito por un neurocientífico que está muy interesado por la divulgación. En el cuál intenta traer varios puntos a la mesa, desde el clásico: ¿Los videojuegos nos hacen violentos? hasta unas más nuevas como: ¿Puede un videojuego ayudar a entrenar nuestro cerebro?. El autor va alternando entre datos científicos y de cultura gamer, lo que hace que la lectura sea bastante dinámica y sencilla.
Soy un jugador regular de videojuegos desde que iba a la primaria y guardaba parte del dinero que me daban para ir a las arcades. Tengo más de 10 años jugando regularmente con un amigo pero en los últimos días me sorprendió jugar con personas con las que no me imaginaba coincidir en este hobby. Es por esto que decidí hacer este análisis del juego de moda e intentar entender cómo llegó tan lejos.
Como lo mencioné en un post anterior, tengo en mi PC tanto Linux como Windows y cada uno lo utilizo para cosas diferentes. Pero una de las razones más importantes para no quitar Windows son los videojuegos. Este post va a ser más reflexivo que técnico ya que la idea es desarrollar un poco el tema de los videjuegos con respecto al sistema operativo del Pingüino.
Hace unos días vi que un usuario de un grupo de Linux comentó que estaba jugando Fall Guys en Linux, esto me sorprendió ya que yo intenté correrlo y no logré ejecutarlo.
